El desequilibrio químico del cuerpo es un tema desconocido para la mayoría de personas, ocasiona la baja de defensas y mayor predisposición a adquirir todo tipo de enfermedades, afectando nuestra calidad de vida, hasta conducirnos a la muerte.
Se estima que más del 95% de las personas en la actualidad, experimentan un desequilibrio químico en el cuerpo. Además, su nivel de pH en la sangre es inferior al óptimo.
La escala del pH varía del 0 al 14, de forma que se considera 7 como un valor de pH neutro, menos de 7 se vuelve más ácido, arriba de 7 se vuelve más alcalino. La acidez o alcalinidad (base) del cuerpo se puede medir por medio de la sangre, orina o saliva.
El nivel idóneo del pH en la sangre debe oscilar entre 7.35 y 7.45, pero la contaminación atmosférica, los malos hábitos alimenticios o el estrés acidifican el cuerpo y alteran este pH, la sangre reacciona y roba los nutrientes que necesita del resto de órganos vitales para compensar el desequilibro.
El pH del cuerpo es diferente en cada parte, y no siempre debe ser de nivel 7. Cada parte del organismo tiene su equilibrio, y debemos entender por qué debemos de mantener esos equilibrios.
Como siempre, al romper cualquier equilibrio, estamos haciendo trabajar a nuestros diferentes organismos para volver a encontrar el equilibrio, por tanto, le estamos pidiendo al cuerpo un extra no necesario.
Estos son los niveles de pH recomendados en los diferentes medios del cuerpo humano:
Tabla de pH del cuerpo humano
SUSTANCIA | NIVELES DE pH APROXIMADOS |
Orina Sangre Saliva Piel | 4.5-8 7.35-7.45 7.-7.4 4.5-5.75 |
Como se puede ver, en general los niveles de pH del cuerpo tienden a ser más alcalinos que ácidos, es por ello que los últimos estudios sobre salud indican que acercarnos en general a valores más alcalinos puede prevenir un buen número enfermedades.
Como única excepción podemos ver que el pH de la piel, crea un manto ácido protector para evitar agresiones a la epidermis. En este caso además vemos como los bebes tienen un pH de piel aún menor ya que no han terminado de crear un buen manto ácido sobre su piel y de ahí que tengan una piel más delicada y sensible a los agentes exteriores.
Si mantenemos nuestro cuerpo en su estado natural, es decir, ligeramente alcalino (con el pH de la sangre por encima de 7), estará protegido frente a enfermedades. No va a tener que ceder ningún tipo de sustancia y va a propiciar un clima poco favorable para virus y bacterias.
En cambio, un cuerpo ácido es un cuerpo enfermo o propenso a la enfermedad porque la sangre, las células y los órganos vitales viven en un entorno hostil y están en constante peligro. Tenemos que trabajar apropiadamente para que nuestro cuerpo logre estar alcalino y no ácido.
Las consecuencias de un pH ácido:
- Disminución de la actividad del sistema inmune.
- Clima propicio para la formación de células cancerígenas.
- Favorecimiento de la calcificación de los vasos sanguíneos.
- Pérdida de masa ósea y masa muscular.
- Fatiga crónica.
- Dolor y espasmos musculares.
- Piel irritada.
- Cansancio generalizado.
Cuatro claves para tener un cuerpo “alcalino”
Las claves para combatir la acidez son: la alimentación, el ejercicio físico, el equilibrio emocional y la depuración.
1.- Alimentación
Lo ideal es compensar con más alimentos alcalinizantes –ricos en potasio, magnesio y/o calcio– para que nuestro cuerpo no tenga que sufrir robando minerales para alcalinizar la sangre. De este modo lograremos equilibrar la cifra del pH. La recomendación de los expertos es consumir menos alimentos acidificantes y más alimentos alcalinizantes.
- Alimentos ácidos: alcohol, bebidas gaseosas, frituras, azúcar refinado, harina blanca, café, zumo de frutas envasado, chocolate, mermelada, leche, arroz, carne roja y frutas en general.
- Alimentos alcalinos: patata, lechuga, pepino, coles de Bruselas, espinacas, algas, limón, bayas de Goji, palta, ajo, té verde, jengibre y almendras crudas.
2.- Ejercicio físico
Un cuerpo sedentario realiza sus funciones con mucha más lentitud. Se aconseja hacer deporte adaptado a la edad y el nivel de preparación de cada uno para “mantener el cuerpo vivo”. Así se activa el metabolismo, se eliminan toxinas y el organismo funciona bien.
3.- Equilibrio emocional
Según la Organización Mundial de la Salud, la salud implica bienestar físico y psíquico, así como bienestar ambiental y social. El estrés emocional provoca que ciertas hormonas nos tensionen y dejen residuos en el organismo.
4.- Depuración
Tenga en cuenta que miles de personas han curado su Diabetes, Cáncer y otras enfermedades, equilibrando el pH de su cuerpo con la ayuda de productos orgánicos, potencialmente dotados por extractos que dan soluciones a la mayoría de las enfermedades. Hay testimonios de estas personas diciendo que son un milagro viviente y sólo desean que más gente conozca los beneficios de hacer cambios en su estilo de vida.
Depurar los residuos de nuestro cuerpo es imprescindible. “Los tóxicos también nos acidifican, sobre todo si nuestro organismo no limpia o no drena correctamente. Por eso es recomendable recurrir a procedimientos apropiados y garantizados que nos ayuden en esta labor de limpieza, logrando con esto recuperar la salud.
El ser humano nace con las facultades de producir el combustible que cargue de energía y nutrientes a las células del organismo, así como el medio de eliminar las toxinas, ayudándolo a convertir el cuerpo en una fortaleza que aguante saludablemente el día a día de manera apropiada.
Lamentablemente en nuestros días la mayoría de personas han perdido esas facultades, debido a una mala alimentación y una serie de malos hábitos, que los han encaminan a ser víctimas del ataque de los virus y bacterias que afectan el sistema celular del organismo, provocando todo tipo de enfermedades.
Hemos aprendido en este artículo que el nivel idóneo del pH en la sangre debe oscilar entre 7.35 y 7.45 para lograr mantenerlo en un estado alcalino.
Ya estamos claros, que un cuerpo ácido es un cuerpo enfermo o propenso a todo tipo de enfermedades principalmente cancerígenas, porque la sangre, las células y los órganos vitales viven en un entorno hostil y están en constante peligro.
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Entendimos muy bien que tenemos que trabajar para que nuestro cuerpo esté alcalino y no ácido, y la mejor solución es, la desintoxicación con productos a base de Ganoderma Lucidum que no solo desintoxican, sino aumentan tanto la energía física como la mental, liberando el cuerpo de químicos, radiación, contaminación y otros materiales extraños que bloquean nuestros procesos naturales de depuración, además, evita la retención de líquidos y produce un pH más equilibrado, fortalece el sistema inmune, mejora la microcirculación del cuerpo, la regulación de oxígeno y de nutrientes, así como la eliminación apropiada de los residuos. Y reduce significativamente el dolor.
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